Se dice, pero no con mucha evidencia, que el avistamiento,aterrizaje del OVNI de Aluche en el 1966 fue la prueba confirmatoria de que los UMMITAS eran reales.
Sabemos que los dos testigos principales eran Jordán Peña, y su amigo V. Ortuño, que amañaron su escenificación.
La verdad es que el caso dio la vuelta al mundo. Y en algunos textos ufológicos se cita como prueba de la materialidad de los mismos platillos. Ya he dicho en varias ocasiones que el el caso no fue estudiado en profundidad. Pero ahora diré una de las más importantes contradicciones del mismo.
Los OVNIS que aterrizan con pies de aterrizaje no dejan zonas chamuscadas. El OVNI de Aluche dejo una zona circular quemada...y tenía pies de aterrizaje. Dejó huellas...eso sí. Segunda contradicción, Jordán Peña esparció material radiactivo en el lugar del hecho. Y he de decir que los OVNIS emiten radiciones en el espectro de los RAYOS X y LOS RAYOS Gamma, esto es, ionizantes; pero meramente en el momento de su aproximación, estando ellos presentes, y no dejan radiactividad residual.
Así que Jordán oyó campanas pero no sabe dónde. Como no se midió la radiactividad, no se recogieron muestras, no se investigó el caso, la única prueba eran las huellas y los testimonios amañados. Y pese a todas estas negativas estoy convencido de que en Aluche ocurrió algo insólito en aquel febrero de 1966.
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