En la carta D-47, " Transformaciones neurocorticales" los ummitas nos relatan como en un pasado intentaron modificar el comportamiento a través de eso que hoy llamamos " neurocirugía". Pero fue un fracaso,nos dicen, porque en los cerebros manipulados se produjo un corte " como eléctrico, como energético, como una caída de la luz en un apagón ", y ese apagón fue del alma, porque cayó la red de átomos de " DIIUYAA ", esto es de Kripton. Lo primero que pongo en su conocimiento es que escogieron para este experimento, a 78 delincuentes, y a 180 niños de ambos sexos, retrasados mentales. La técnica como la cuentan es muy de cajón de sastre, pues localizando las lesiones, a nivel incluso de una sola neurona, las eliminaban y las sustituían por otras sanas. En aquellos sujetos se borraban recuerdos, hábitos, pues sus cerebros se habían convertido en una " tabla rasa". A su vez una vez intervenidos, alcanzaban un alto grado, de desarrollo intelectual. Y eso que les ilusiono, un buen día, se les vino abajo, porque los sujetos se convirtieron en automatas, sin alma. Lo que tenían antes del apagón no era alma, pero debía parecersele, pues los veían como normales.
Se darán cuenta de la sarta de chorradas vertidas en tan poco espacio de tiempo. Es la version ummita del mito de Franquestein , o el moderno Prometeo...no por su suplicio, sino porque Prometeo, creo al hombre...
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